viernes, 28 de junio de 2013

RT (Russia Today), fabula que Siria detuvo a 11 soldados israelíes en Al Qusair

By Rubén Kaplan La cadena de televisión de noticias global multilingüe con sede en la Federación de Rusia y a cargo de RIA Novosti, difundió en idioma español, seguramente en árabe, probablemente en ruso, pero curiosamente no en inglés, que el 20 de mayo pasado tropas gubernamentales sirias habían detenido a 11 militares israelíes durante un enfrentamiento con los opositores del gobierno de Damasco en la ciudad de Al Qusair, un importante baluarte de las fuerzas jihadistas situado en el sur de la provincia central de Homs. Basándose en sospechosas y poco confiables fuentes oficiales sirias, RT agregó imaginando tramas o argumentos, que durante el enfrentamiento también fue confiscado un vehículo militar procedente de Israel, que constituía una prueba clara de la implicación de efectivos castrenses y miembros de inteligencia judía en el país árabe. Por su parte, un funcionario sirio no identificado detalló que la unidad detenida sirve para monitorear la comunicación e interferir señales inalámbricas. “En el coche encontramos munición de guerra, uniformes y diferentes medios que se utilizan para transmitir información”. Asimismo, también se reveló el hallazgo de un mortero de defensa israelí en la región de Al Dabaa, situada a siete kilómetros de Al Qusair. La evidencia para sostener la acusación fue la exhibición de un video donde se puede observar un vetusto y deteriorado jeep con una inscripción en hebreo que pudo haber sido escrita por cualquier aprendiz. A pesar de la burda y precaria prueba la agencia oficial de noticias siria, SANA, reseñó que gracias a este operativo, en el que también resultaron heridos dos militares israelíes, el Gobierno sirio logró recuperar el control de gran parte de Al Qusair. Elucubrar que soldados israelíes estén mezclados con jihadistas islámicos que odian a los judíos aún más que al sanguinario Bashar al- Assad , es un delirio, que reitera pensamientos absurdos y sublima la incoherencia. Transcurrido más de un mes de la supuesta detención de los soldados israelíes, sugestivamente la identidad de ninguno de ellos fue dada a conocer, la televisión oficial no exhibió a los arrestados, ni ninguna otra agencia de noticias internacionales levantó la información que, de ser cierta, hubiese causado una verdadera conmoción. La penosa excepción fue Telesur, el canal de noticias venezolano que se emite a través de satélite desde Caracas, que se encargó de repetir la falacia en diarios de su país, tal vez basándose no sólo en RT, sino en un informe confidencial que recibió el fraudulento presidente Nicolás Maduro, del pajarito vector de Hugo Chávez. El 3 de mayo último la agencia de noticias Reuters informó que el Estado judío estaba procesando a un árabe israelí que se unió brevemente a las fuerzas rebeldes que luchan para derrocar al presidente Bashar al-Assad. Arrestado después de su regreso a Israel, Hikmat Massarwa, un panadero de 29 años de edad, de la aldea de Taibe en Galilea, está acusado por la Agencia de Seguridad Interna de Israel Shin Bet de entrenamiento militar ilegal, que tiene contactos con agentes extranjeros y viajar a un estado hostil. Técnicamente Israel está en guerra con su vecino del norte. Se capturaron los Altos del Golán en la guerra de 1967, se construyeron asentamientos y anexó la tierra. Pero la beligerancia era rara y la frontera ha permanecido en silencio durante décadas. La Siria de Assad es parte del llamado Eje de la Resistencia, junto con Irán y Hezbollah en el Líbano, los dos archienemigos del Estado judío. Pero la propia Siria evitó un conflicto abierto. Israel tardó en dar la bienvenida al levantamiento contra Assad cuando estalló en marzo de 2011. Aunque algunos líderes ahora piden su derrocamiento, los planificadores se preocupan por lo que puede seguir. Israel no ha dado indicios de tener contactos con la oposición de Siria. Pero ha coordinado estrechamente cuestiones de seguridad con Jordania, a la sazón partidaria de algunas facciones rebeldes. La posible expansión de la guerra civil en Siria, motivó que El Consejo de Seguridad de la ONU renovara el jueves 27 de junio por seis meses, una misión de mantenimiento de la paz en la frontera de Siria e Israel. La resolución acordada por unanimidad hace hincapié en la necesidad de que las fuerzas de paz, que actualmente sólo llevan armas de fuego, puedan aumentar su protección. Los diplomáticos dijeron que las tropas probablemente ahora puedan pertrecharse con chalecos antibalas, vehículos blindados y ametralladoras. Para reforzar su débil información o presuntamente darle más entidad, RT que es el quinto canal de noticias extranjero de mayor audiencia en los Estados Unidos, después de BBC World News, Deutsche Welle y Al Jazeera, recoge un comentario de Carlos Martínez, al que denomina analista internacional, aunque éste se autodefine en su blog como “Soy politólogo y trabajo de gerente en una empresa pública. Milito en ATTAC y soy socialista”. “Soy en conclusión un socialista de izquierdas, altermundista (sic) y muy comprometido contra la globalización neoliberal y sus secuelas”. Martínez, quien también por su ideología de izquierda, fue entrevistado ocasionalmente por Telesur, considera que la injerencia de Israel en el conflicto interno sirio, tiene un objetivo preciso, puesto que allí hay una coalición entre Israel, Occidente y las monarquías del Golfo para acabar con la influencia de Irán. Además, Martínez enfatizó que una Siria completamente destrozada y sin un gobierno claro sería un gran paso para conseguir este objetivo, ya que Damasco y Teherán siempre han sido aliados fieles. Olvidadizo, Martínez, no hizo ninguna referencia a la intromisión de Irán, Rusia y el grupo terrorista Hezbollah para respaldar al asesino Bashar al- Assad, al que por estricto pragmatismo y por ser sus adversarios jihadistas peores que él, a Israel no le conviene que derroquen. Rubén Kaplan http://www.rkpress.com.ar/